
viernes, 18 de enero de 2008
UN SIGLO desde el I CONGRESO NACIONAL DE HURDANÓFILOS de Plasencia.-

miércoles, 16 de enero de 2008
Entre 1991 y 2001 Casares de las Hurdes perdió un 30,7% de su población. Entre 2001 y 2006 el 17,0%.
La razón fundamental de este descenso no es otra que la salida masiva de la población joven en busca de nuevas perspectivas laborales, los cuales fijan su residencia en el lugar donde pueden desarrollar su actividad profesional o laboral. En segundo lugar estaría la alta tasa de mortalidad en relación con la baja tasa de natalidad.
Esto que en principio pudiera ser común a todos los municipios rurales como el nuestro, en el caso de Casares se manifiesta con una mayor rotundidad. Y podemos decir sin temor a equivocarnos que Casares de las Hurdes ha sido el municipio de las comarcas del Ambroz, Tierras de Granadilla y Las Hurdes que más población en términos porcentuales ha perdido desde 1991, excepción hecha de Ladrillar, que se sitúa en el 48%.- Nuñomoral está en el 33,2% de pérdida; Pinofranqueado en el 9% % y Caminomorisco en el 2,5 %.
En el último lustro 2001-2006 Casares ha sido después de Ladrillar el que en términos porcentuales más población ha perdido, seguido de Nuñomoral con un 11,8 %. Los tres municipios de las Hurdes Altas han perdido población en ese quinquenio frente al 1,8% que ha ganado Pinofranqueado y al 4,5% que la ha incrementado Caminomorisco.
La tendencia, por tanto, en los primeros años de este siglo es que ha descendido la progresión de pérdida de población, aunque en lo que respecta a Casares y Ladrillar sigue siendo muy elevada, y se ha invertido en Pinofranqueado y Caminomorisco.
El total de las tres comarcas, se sitúa en un -11,6% en el periodo 1991-2001 y en un 4,1% negativo en el periodo 2001-2006, por lo que la pérdida poblacional en Casares es muy acusada en comparación con el global de los datos.
La densidad de población en nuestro municipio es de 28,5 habitantes por Kilómetro cuadrado, lo que resulta más alta que la Provincial que está en 20,78 habitantes por km2.
El 24% de la población tiene más de 65 años, mientras que tan solo el 8,2 tiene menos de 15 años.-
A mi juicio los datos los datos son tozudos y ponen de manifiesto que hemos hecho muy poco en estos quince años para dulcificar el saldo migratorio y, lo que es más grave, que seguimos sin hacer nada para detener y dar la vuelta a esta tendencia.
No estamos en condiciones de poner trabas a las iniciativas que pretendan crear empleo o estimular la residencia en nuestra localidad. Pensemos y pongámonos manos a la obra.
La Junta de Extremadura, ha elaborado un Plan Territorial que conoce nuestro Ayuntamiento, el mismo analiza la comarca de las Hurdes en unidad con la del Ambroz y Tierras de Granadilla en sus aspestos físicos y territoriales, Socioeconómicos, Urbanisticos y patrimonio histórico Cultural. Este es un documento que refleja la realidad de nuestros pueblos y sobre el cual se pueden extraer conclusiones.
domingo, 13 de enero de 2008
En 1922, en Casares de las Hurdes, habia 75 mulos y 90 Asnos

jueves, 10 de enero de 2008
Muros de Piedra seca
Los jurdanos saben mucho de piedra seca, de portillos y de bancales. Habría que hacer un monumento al trabajador de la piedra.
miércoles, 9 de enero de 2008
Aurora y Gildo
Mi abuela no sabía leer ni escribir, pero se las ingeniaba para que alguien escribiera las cosas que quería decirme a mí y a mis hermanos cuando nos encontrábamos lejos en el Colegio. Cuántas lágrimas derramadas al leer y releer aquellas palabras escritas a bolígrafo en hojas de cuaderno. En medio de las cuartillas, tapados con otras cuartillas siempre me enviaba un billete de cien pesetas. No hacía falta que me enviara dinero para que yo la recordara como mi abuela del alma. No se me olvidarán nunca los cientos de besos que nos daba cuando llegábamos o cuando nos marchábamos. Su alegría se transmitía y su bondad no tenía parangón. Mi abuela tenía un agujero en la mano. Se quitaba las cosas de la boca para dárselas a la gente. Cuando quería sabía sacar de sus casillas a mi abuelo. Le encantaban los tomates, muy picados. Las ensaladas de tomate y cebolla no faltaban en su casa a la hora de comer. La casa se le venía encima, por eso se levantaba antes de amanecer y por las noches era un placer escuchar las historias que contaban en el "serano" a la puerta de la casa sentados en el poyo. Mi abuela disfrutaba con la tierra y con los frutos de la tierra. No perdía nunca la dúa y regaba siempre que podía sus huertos y canteros, sus árboles y sus colineras. La cocina no le gustaba y la rehuía siempre que podía, aunque todos los días preparaba su puchero y sus "tajás".- La alegría venía donde ella estaba. Sus coplas, sus canciones, están profundamente incrustadas en lo más profundo de mis oídos. Cierro los ojos y la escucho cantar: "En la provincia Valencia un matrimonio vivía, eran ricos y hacendados, sólo una hija tenían..." Todavía hoy hay muchas cosas impregnadas con su aroma, con su esencia, con su nombre: AURORA.